jueves, 25 de febrero de 2016

Un poco de HUMOR

¿Que tal si hoy añadimos un poco de humor a nuestro blog? En forma de imágenes os dejamos unos cuantos comentarios sobre la palabra... un poco polémica: Gilipollas. 



PD: Estas imágenes no son propias, están sacadas de internet. Cabe destacar que con estas imágenes no pretendemos insultar a nadie, si no aportar un poco de felicidad y risas al mundo, que falta hace.
En fin... nosotros humor no, pero lo que es arte nos chorrea por todos los sitios así que... como siempre os invitamos a visitar: http://www.cuadrosblangar.es/

SEVEN capítulo 3

"Durante las siguientes semanas intenté evitarla todo lo que pude pero sin que se llegara a notar demasiado. Comíamos juntos alguna vez, pero la mayoría del tiempo cada uno hacía su vida y era lo mejor, porque cada vez que pasábamos un rato juntos me ponía nervioso y no me gustaba estar nervioso. Siempre tenía las emociones controladas y por una humana eso no iba a cambiar. 
Normalmente Ángela se pasaba el día pintando o haciendo la visita por la sucursal con turistas, también hablaba muchas veces por teléfono con una mujer y ella siempre le preguntaba por mí. A estas preguntas Ángela contestaba de la forma más vaga posible diciendo que se podría decir que éramos amigos y que nos llevábamos bien, pero al hablar de mi solía intentar cambiar de tema, evitarlo a toda costa, aunque la otra mujer era muy insistente y siempre acababan comentando algo.
Yo por el contrario me dedicaba a hacer actividades con los niños en el pueblo, les enseñaba a jugar al lacross desde hacía un par de semanas y por la tarde salía a correr hasta que llegaba el puerto y me quedaba mirando el mar durante un rato hasta que me apetecía volver a la casa. Así reducía os los encuentros  a las comidas y poco más.
Un viernes yo estaba en el sofá mirando las noticias cuando  ella se sentó a mi lado con la camiseta manchada de pintura, algo bastante normal en ella. Tenía cara de aburrimiento y al cabo de un rato me miró, se le iluminó la cara y me dijo:
-¡Eh!, ¿sabes que podríamos hacer?
-No- y sonreí- que yo sepa aún no puedo leer mentes.
Ella rió y dijo:
-Hoy hay una fiesta, la gente va a ir a bailar. Estoy cansada de estar en casa. ¿Te apetece ir?
Yo me quedé pensándolo y ella siguió intentado  convencerme dada mi falta de entusiasmo.
- Vamos por favor... Necesito que me acompañes, si no... los babosos del pueblo me acosarán y estaré muy incómoda. Además así pasamos un poco de tiempo juntos que últimamente no hablamos casi y eres... bueno, el único amigo que tengo aquí por ahora. 
Me supo mal por ella así que acepté la invitación, pero puse dos condiciones, una fue que no bailaría y la otra que no volveríamos demasiado tarde. Ella las aceptó encanta y se fue a arreglarse para salir a cenar a la plaza del pueblo. Yo hice lo mismo, fui a ponerme otra camiseta limpia y unos vaqueros.
A los diez minutos yo ya estaba arreglado,  tenía  puesta una camiseta gris de pico y unos vaqueros azul oscuro. Me peine el pelo de forma que se quedo de punta y me afeité. Por el contrario Ángela tardó media hora en salir de su habitación y otros diez minutos del cuarto de baño. Al fin, pasado ese tiempo, bajó por las escaleras. 
Estaba preciosa, se había hecho ondas en el pelo y maquillado, llevaba una raya fina y oscura en el ojo que lo estilizaba y lo hacía aún más bonito y un poco de colorete. Se había puesto un vestido que le llegaba casi a la rodilla de flores y se había puesto unos tacones a conjunto. 
-¿Cómo estoy?- preguntó mientras giraba para que viera como le quedaba el vestido.
-Estás estupenda- dije con sinceridad.
Ella sonrió y después de coger las llaves de casa salimos. No hacía falta coger el coche porque la plaza estaba a cinco minutos andando. 
Al llegar vimos que habían puesto una carpa con mesas y una cocina improvisada para que la gente cenara allí. Un poco más a la derecha estaba la pista de baile, con un equipo de música enorme que manejaba un chico del pueblo. Ella decidió sentarse en las últimas mesas ya que eran las más cercanas a la pista de baile..."

¿Qué pasará en la fiesta del pueblo? ¿Algún acercamiento de la parejita? 

 

jueves, 18 de febrero de 2016

BRUNO MARS

Este hombre tiene un ritmo sin igual, a sus 25 añitos es todo un triunfador en el mundo de la música. Os dejamos con el vídeo! Uptown Funk!

lunes, 15 de febrero de 2016

SEVEN: Capítulo 2

Os dejamos con un trocito del capítulo 2, como os dijimos seguimos poniendo algún que otro trocito de esta historia, disfrutadla:


"Después de una larga charla  y de estar de acuerdo en que ninguno de los dos tenía porque gastarse más dinero del que ya habiamos gastado en la casa, que por lo visto la mujer no tenía intención de reembolsaarnos, decidimos acondicionar la pequeña habitación con el sofá cama para mí, por haber sido el último en llegar.
Ángela me ayudó a mover el sofá y a abrirlo, a poner las sábanas...etc. Una vez hecho todo esto me dejó solo para que pudieraorganizarme y la verdad es que lo agradecí. Me senté en la cama mirando a la pared de enfrente. ¿Qué iba a hacer? Puede que mi año de relajación se viera afectado por su presencia. Estaba acostumbrado a la soledad. La casa era un espacio privado, un espacio íntimo donde no tenía que fingir ser un hombre corriente. Tendría que hacer un esfuerzo para que mi verdadera naturaleza no apareciera delante de una humana.
Pronto se hizo hora de comer y ya tenía todo ordenado cuando Ángela llamó a mi puerta.
-Hola-dijo cuando abrí- ¿Te apetece comer macarrones?
-Umm... ¿Macarrones?- la miré extrañado- ¿Qué son?
-¿No los has provado nunca? Es comida italiana, o eso creo.-Su cara era de asombro.
-No-respondí- no suelo comer muy variado la verdad.- prácticamente no comía porque no me hacía falta. Los sentimientos y la apariencia era lo único humano que conservaba.
-De acuerdo entonces- cuando se giró para irse añadió- acompáñame, quiero saber más cosas sobre tí. Cuanto más te conozca menos rara me parecerá esta situación... al menos eso creo.
-Te acompañaré, quiero ver como haces eso que llamas macarrones.
Los dos fuimos al piso inferior. Un arco comunicaba la cocina con el salón. Era pequeña pero tenía todo lo necesario para cocinar. Incluso tenía aparatos que yo desconocía por completo, ni había visto ni sabía que eran. Me senté cerca para ver como cocinaba y ella empezó a hacer preguntas mientras sus manos abrían los armarios en busca de ingredientes.
-¿De dónde eres Seven? - una pregunta complicada. Era muy ignorante para pertenecer a una gran ciudad así que pensé en un pueblo pequeño y desconocido.
-Soy de...- mi cerebro pensó rápido y localicé un sitio de Estados Unidos que si podía colar- aquí, de Wyoming. Nací en un pueblecito muy pequeño, no se si lo conocerás... Se llama Lost Springs.
-Pues no, no lo conozco. Hace poco que vivo aquí en los Ámerica así que...
-¿De dónde eres?-pregunté interesado.
-Soy de España, de Alcoy. Hace dos años que vivo en Alabama. Me ofrecieron un trabajo este año aquí y... bueno pues... me mudé en la ciudad.
-Eres la primera Española que conozco- en realidad no, pero si era la primera con la que hablaba, todas a las que había conocido había sido trabajando.
Me interesó el tema de conversación, de donde procedía, su ciudad...etc. Me contó que al acabar la carrera de bellas artes envió currículos por todas partes, especialmente en capitales de ciudades donde el arte estuviera reconocido, París, Madrid, NY...etc.  Estuvo en Nueva York los primeros meses pero la sucursal se movió a Alabama y ella se mudó persiguiendo su sueño. Luego decidieron abrir una sucursal más pequeña en pueblos de Alabama que se encargaran de ser destacado lugar turístico para atraer clientes y como ella había trabajado tan bien le ofrecieron ser la gerente de la sucursal de este pueblo hace un año. Y... así es como llegó aquí."


¿Qué pasará entre Seven y Ángela?, ¿Gran amistad?, ¿Gran amor? quizá...¿Un triángulo amoroso? Descubridlo en: https://www.wattpad.com/story/52773212-seven 


PD: El capítulo no acaba así, como ya os hemos dicho es tan solo un fragmento. 

jueves, 4 de febrero de 2016

FRIDA KAHLO

Os presentamos hoy el segundo tema de post de hoy y... la protagonista es una estupenda mujer.
  FRIDA KAHLO, ¿Sabéis quien es? Bueno, si no lo sabéis os contamos un poco, es una mujer mejicana que nació en Coyoacán. Murió a temprana edad, a los 47 años. Su género era el surrealismo y se dedicaba a la pintura y a la fotografía. Su vida estuvo marcada por su relación amorosa con Diego Rivera, también pintor.
Este artículo viene a raíz de darnos cuenta de que hay bastante ignorancia en temas artísticos y muchos personajes importantes son completos desconocidos para la sociedad, por lo tanto, desde blogger, nos hemos propuesto dar un poco de información sobre pintores importantes. Si queréis saber más cosas podéis descargar la aplicación de nuestra página web en google play: cuadros blangar.
Ahora os dejamos un ejemplo de una de sus obras:


Seven: Capítulo 1

Siguiendo con el ejemplo de historia os añadimos aquí el primer capítulo, y en unos días pondremos algún que otro capítulo más, hoy os dejamos el enlace, y... ya sabéis, descubrir el mundo de Wattpad es emocionante (para los fans del arte claro) 




Llevo 19 años de descanso. Durante este tiempo he conseguido varios trabajos y me he mudado algunas veces. He conocido a gente a la que prometo que llamaré pero que nunca más sabrán de mí.
Después  de haber pasado por NY y por L.A. me dirijo a Alabama. Me gusta pasar los primeros años en ciudades grandes, ya que, al tener tanta afluencia de gente hacen a cada individuo más  anónimo, más  difícil de encontrar... El último  año en cambio  me gusta ir  un pueblo, disfrutar de la tranquilidad y de las fiestas... Cada fin de semana hay algo, puestos en la plaza, bailes, representaciones...etc. Sobre todo me gusta la simpatía y el modo que tiene la gente que vive en los pueblos de acoger a nuevos vecinos. Por todas estas razones siempre visito un pueblo antes de volver al trabajo.
Esta vez he escogido Mobile, es un pueblo que está al sur de Alabama. Alquilé una casa por teléfono desde Los Ángeles. Conduzco por la carretera hasta que por fin veo la señal que indica el camino hacia Mobile. Al cabo de un rato, no demasiado largo, estoy ahí.
Me costó un poco encontrar la casa que había alquilado. Era pequeña, pero bonita. Tenía dos pisos, un porche de madera, un jardín que rodeaba la casa, y una pequeña piscinita en la parte posterior hecha de obra y decorada con azulejos de colores azules y turquesas. Después de dar una pequeña vuelta por el exterior de la casa me dispuse a entrar.
Había un coche en la entrada e imaginé que sería de la casera, que estaba esperando mi llegada para darme las llaves, y supuse que también me daría la bienvenida. Llamé a la puerta un par de veces y una mujer preciosa abrió la puerta. Tenía el cabello negro y largo que le llegaba casi a la cintura. Unos ojos marrón claro rasgados, pestañas largas enmarcaban sus ojos. Una sonrisa iluminaba su cara. No era muy alta, mediría cerca de un metro setenta. Vestía una camiseta de tirantes blanca manchada de pintura azul y unos vaqueros cortos. Me di cuenta de que no llevaba zapatos y que sus uñas de los pies estaban pintadas de azul oscuro.
-¿Puedo ayudarte en algo?- me preguntó.
-Hola, soy Seven, el chico que te ha alquilado la casa- luego me quedé pensando en que no era la voz que recordaba haber escuchado por teléfono- No sabía que eras tan joven cuando hablamos por teléfono- y le tendí la mano.
-¿Perdona?,-entonces se rio- ¡Ah! ¡Ya lo entiendo! ¿Es una cámara oculta no es cierto?, ¿Algún amigo mío te ha enviado para gastarme una broma?
-No sé de que me hablas, me gustaría poder entrar las maletas en la casa y descansar si no te importa. Aquí fuera hace un calor terrible.
-Te digo que esto tiene que ser una broma, porque me han alquilado la casa a mí. Yo no soy la propietaria, soy la inquilina.
-Tiene que haber un error...-dije preocupado- esto... alquilé la casa hace un mes por teléfono, hablé con una mujer, una tal Margarita. Ella me dijo que estaba libre, que podía alquilarla.
-Umm... Bueno.- se puso seria un momento y luego añadió con una sonrisa- entonces deberías pasar, averiguaremos que está pasando, ¿de acuerdo?- no la ví muy preocupada, supuse que seguiría pensando que era una broma.
-Gracias- dije sonriéndole amablemente- esto es un poco extraño- dije mientras cogía las maletas.
-Trae, te ayudo. Llevas unas cuantas maletas, necesitarás dos manos extra.
-Gracias de nuevo.
Entre los dos cogimos mis cuatro maletas y las metimos dentro de la casa. La puerta principal daba directamente al salón. Tenía una pantalla plana de mediana calidad, dos estanterías y la pared estaba decorada con la cabeza de un ciervo. Algo que era bastante espeluznante y que convenientemente no salía en las fotos de la página web. La mayoría de la estructura era de madera y la otra parte de cemento revestido con un color tierra lo que daba un ambiente rústico a la casa. No estaba nada mal. Además las grandes cristaleras hacían ver las estancias más grandes y iluminaban toda la casa.
-De momento dejemos las maletas en el salón.
Yo asentí y me entró la curiosidad sobre aquella chica. Puede que fuera una ocupa o algo parecido, así que decidí preguntar.
-¿Cuánto tiempo llevas en la casa?
-Dos días- dijo ella dándome la espalda mientras buscaba algo entre los cojines del sofá- ¡aquí esta!- se giró hacia mi y me enseñó un teléfono móvil- Llamaremos a la casera y averiguaremos que pasa.
-Buena idea.
Ella buscó en la agenda del teléfono y cuando encontró el número que le interesaba le dió a un botón y el móvil empezó a sonar. Al cabo de un rato se oyó una voz.
-Margarita al habla. ¿Que desea?
-Hola Margarita. Soy la chica que le ha alquilado la casa.
-Si, dime bonita- saludó la mujer cordialmente.
-Resulta que tenemos un pequeño problema. Ha aparecido un hombre. Se llama Seven. Dice que le ha alquilado la casa... y bueno... me gustaría... nos gustaría saber que es lo que ha pasado.
-¡Oh! ¿No me digas?, debe de haber un error.
-Si Margarita, eso esta claro- la chica me miró intentando decir que la mujer se estaba haciendo la sueca- ¿entonces conoce a Seven, no?
-Sí, sí, por supuesto que le conozco. Me llamó hace un mes...- luego se hizo el silencio al otro lado del teléfono- disculpad mi error. Creía que él estaría en la casa al año que viene, cuando la abandonaras tú. Debí de entender un año que no era. Perdonadme los dos.
-¿Hay algo que podamos hacer?- preguntó ella.
-No creo. En esta época del año no hay lugar en ningún sitio para quedarse. Como mínimo tendréis que pasar los meses del verano juntos. Hasta que la gente vuelva a las grandes ciudades a trabajar.
-Señora. No hay dos habitaciones, esa no es una opción posible.
Al otro lado del teléfono se empezaron a oir ruidos extraños y la voz se empezó a cortar de un modo que parecía que lo estaba haciendo a propósito. Lo último que dijo fue:
-En cuanto pueda les llamaré- cosa que entendimos a duras penas.
Los dos nos miramos cuando la llamada finalizó. Nuestra mirada era de confusión. Ninguno de los dos sabía que hacer, o que solución dar.
-No se que decir- dije honestamente- la verdad es que al principio he creído que eras una ocupa.
Ella sonrió y se rió un poco:
-Pues ya ves que no...- luego preguntó- Oye... ¿Seven, no?- yo asentí con la cabeza- ¿Cuánto tiempo has alquilado la casa?
-Todo el año. Hasta el verano que viene. Después me iré de... Estados Unidos- tendría que volver a trabajar en la organización por estas fechas el próximo año.
-Dios mío... El mismo tiempo que yo más o menos... No sé como arreglar esto. No hay dos habitaciones. Solo una y un pequeño cuarto que se podría llamar de invitados con un sofá cama. No hay nada al parecer en todo el pueblo. Al ser pequeño está todo copado a estas alturas del verano. Y ni siquiera nos conocemos, no sabes ni mi nombre y...  ¿vamos a vivir juntos?- tomó aire y siguió hablando rápidamente- ¿y si eres un asesino o un ladrón?
Yo sonreí ante su pequeño ataque de nerviosismo. Y respondí de la forma más simple que pude:
-¿Y si me dices tu nombre?
Ella paró de mirar a todos lados y fijó su mirada en mi con curiosidad.
-No soy ningún ladrón. Y mucho menos un asesino.
-Si fueras un asesino o un ladrón tampoco lo admitirías ¿no crees?
Yo la miré y le hice un gesto animándola a contestar. Al fin lo hizo.
-Vale, bien...- accedió- Mi nombre es Ángela. Ángela Fox.
-Encantado de conocerte Ángela. Mi nombre es Seven Black.